Ya todos sabemos que "toda forma de poder debe ser cuestionada". Y con eso, qué hacemos?

sábado, 14 de noviembre de 2009

Sensación

Tengo la constante sensación de que los imperativos institucionales, esas construcciones seculares que hacen que nuestras ideas tengan una lógica profundamente antihumana y que no nos demos cuenta, son cada vez más imperantes en el mundo.
Así, las actitudes acríticas y todos sus resultados –la xenofobia, el racismo, el discurso a favor de que la riqueza exagerada es socialmente inocua, el sostenimiento de las jerarquías heredadas, etc.- se convierten en el comentario repetido incesantemente.
En medio de toda esa construcción discursiva, la realidad le duele a cada uno de los que sufre hambre, violencia (física, verbal, institucional), injusticia. Un hambre heredado, una violencia infundada, una injusticia construída.

5 comentarios:

  1. celebro tu sensibilidad ante estas cuestiones...qué hacer nosotros ante tanta desproporción? me pregunto...

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  2. Hay muchísimas alternativas, y cada uno puede hacer lo suyo desde donde esta. Granitos de arene frente a un mar de injusticias, pero absolutamente necesarios.
    El verdadero cambio, según mi parecer, viene de la mano de la educación. De la educación verdadera, humana, no propagandista.-

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  3. también creo con vos que el cambio pasa por la educación, de todos y de cada uno mismo. y tb me da qué pensar esto de sentirnos tan pequeños/impotentes ante los monstruos del poder, la injusticia y etc...no sé, algo así como la pequeña 'ventaja' de poder recomenzar siempre desde abajo, en el abrazo al que está al lado

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  4. mmm...en realidad no sé si pude expresar bien...'ventaja' no sería la palabra p esto de ser hormiga, no?

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  5. No, ciertamente.
    Pero sí una especie de autoridad moral, espiritual, creo. Lo que constituye una suerte de "ventaja" al momento de sacar fuerzas de algún lado, según mi parecer.

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